Domingo 26, con una asistencia fervorosa y grata al Señor se inició este culto. Tras la alabanza, el Pr. Fernando desarrolló el tema «Dios de segundas oportunidades» comenzando la lectura en el libro de Jonás, el capítulo 1 donde se relata la historia del autor, desde la tempestad causada por su desobediencia en que casi perece el barco con su tripulación, hasta la declaración fehaciente de Jonás de qué él era el culpable de lo que estaba sucediendo, por dar la espalda a su Dios. Entonces la tripulación aún sabiendo que debían arrojar al causante al mar, temieron a Jehová y pidieron perdón por lo que iban a hacer. Al lanzarlo al mar, este se calmó por lo que aquellos hombres creyeron en Él y le ofrecieron sacrificios y votos.
Jonás tuvo una segunda oportunidad. Y es digno de mencionar que esté suceso de haber pasado tres días en el vientre del pez ha servido de comparación con el tiempo que pasó Jesús en la tumba (Mateo 12:40-42)
Ya en Nínive se limitó a decir las palabras que Dios mandó decir y no otra, por lo que toda la ciudad se arrepintió, tras ayunar y convertirse de su mal camino. De este acontecimiento podemos extraer preciosas enseñanzas.